Cambiar tus faldas pequeñas por unas grandes aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de mama hasta un 30%. ¿Por qué sucede esto?
Cambiar tus faldas pequeñas por unas grandes aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de mama hasta un 30%, pero no es la falda en sí, sino lo que hay debajo lo que es dañino para tu salud.
En un estudio publicado en BMJ Open descubrieron que subir de peso aumenta ese riesgo, pues el tejido graso fomenta la producción de estrógeno, el alimento de los tumores.
¿Pero, por qué medirlo con las tallas de las faldas? Porque la grasa que se acumula alrededor de la cintura propicia el desarrollo de los tumores, y es fácil de medir por la talla de falda que usas, incluso más fácil que hacerlo por medio del índice de masa corporal.
Los investigadores analizaron los casos de más de 93 mil mujeres, y un incremento en el tamaño de las faldas fue la medición que mejor predijo el desarrollo de cáncer de mama. Las mujeres que subieron sólo una talla de falda cada 10 años entre los 20 y los 60 años mostraron ser 33% más propensas a desarrollar cáncer de mama después de la menopausia. ¡Subir DOS tallas cada 10 años incrementa tus posibilidades en un 77%!
Los doctores saben que subir de talla es casi inevitable, pero piden que las mujeres vivan su vida de la forma más saludable posible y que traten de no subir de peso después de la menopausia.Tampoco te asustes si cambiaste de talla recientemente, analiza si cambiaste también de marca pues las tallas pueden ser distintas en cada tienda.
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