Se decidió recientemente revisar las normas de introducción del control fronterizo en el espacio de Schengen.Así fue el resultado de las negociaciones entre los representantes de la Comisión Europea, el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea celebradas en Bruselas. “Schengen restablece el control fronterizo”, “El cierre preventivo de fronteras en Europa es una medida excepcional”, “El principio de la libre circulación está bajo amenaza” - así son los títulos de varios artículos publicados en los medios de comunicación europeos en respuesta a la decisión anunciada.La revisión de las normas busca reforzar el control fronterizo. Según los expertos, los Estados que forman parte del espacio de Schengen siempre han tenido derecho de cerrar temporalmente sus fronteras. Esto fue posible en caso de una amenaza terrorista o para garantizar la seguridad durante la celebración de varios eventos a nivel internacional. Los países del área Schengen aplicaron esta medida en reiteradas ocasiones durante varios días, ante todo, cuando se celebraban grandes partidos de fútbol o cumbres importantes.La nuevas normas amplian los poderes de los Estados que tendrán el derecho de restablecer el control fronterizo por un plazo de hasta seis meses no sólo en caso de que existe una amenaza a la seguridad nacional o se celebren eventos importantes, sino también si empiezan a acudir al país los inmigrantes ilegales a los que no se logró detener en la frontera de la Unión Europea.Según los expertos, el Consejo de la UE aprobó la normativa similar en 2012, pero ésta fue bloqueada por el Parlamento Europeo. A día de hoy, los diputados europeos dieron su visto bueno a la introducción de las respectivas modificaciones. Conforme al documento aprobado hace varios días, los Estados que forman parte del espacio de Schengen podrán tomar la decisión independiente de Bruselas sobre la introducción del control fronterizo y sólo después deberían justificarla ante la Conmisión Europea. Es curioso que el Parlamento Europeo que también está interesado en participar en la toma de tales decisiones, haya tenido que renunciar a esta idea.Los nuevos acuerdos deben aprobarse en el marco de la sesión plenaria del Parlamento Europeo que se celebrará en Estrasburgo del 11 al 13 de junio. La mayoría de los expertos opinan que sólo se trata de un trámite. Los que se pronuncian por la intangibilidad del derecho fundamental de los ciudadanos de la UE a la circulación libre criticaron esta iniciativa. Los representantes del partido de los Verdes sometieron a las críticas más duras las enmiendas a la legislación vigente. Según una experta de la facción de este partido en el Parlamento Europeo para la política migratoria y el control fronterizo, la ciudadana de Alemania, Franziska Keller, el Parlamento Europeo fracasó tratando de defender uno de los logros más importantes de la UE. Los diputados, de hecho, permitieron a los países miembros de la UE poner el espacio de Schengen bajo la amenaza, concluyó Keller. Su compartidaria y miembro del Parlamento Europeo, Rebecca Harms, copresidenta del partido de los Verdes, opina que el cierre de las fronteras no ayudaría a resolver el problema de inmigración ilegal:—Es imposible resolver todos estos problemas de una vez para siempre... No se mejorará la situación si se revisan las normas de Schengen y se restablece el control en las fronteras. Se podrá resolver estos problemas sólo si los países europeos aplican esfuerzos comunes respecto a la política de los Estados que afrontan tales problemas.El jefe del sector de la integración europea del Instituto de la Economía Mundial y Relaciones Internacionales, Serguéi Utkin, considera que el reforzamiento del control temporal en las fronteras de los países comunitarios no amenaza al espacio de Schengen:—Si uno lee con atención las conclusiones de la UE respecto al espacio de Schengen, podrá observar que la introducción de cualesquiera restricciones es una medida temporal y aplicable solo en circunstancias excepcionales. Desgraciadamente, todos los detalles no se mencionan en los medios de comunicación que sólo publican artículos bajo tales títulos, como “El espacio de Schengen está al borde de desintegración”, etc. No son más que las exageraciones de los periodistas.¿Puede, en realidad, el reforzamiento del control fronterizo separar a más de cuatrocientos millones de habitantes del espacio de Schengen y podrá defender éste de la inmigración ilegal? Todavía no hay respuestas a estas preguntas.
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